La adicción al sufrimiento: Una trampa sutil de la mente.
El sufrimiento no es solo una carga, también se convierte en una herramienta de manipulación, tanto para ti, como para los demás. Un ejemplo clásico es el sacrificio. Nos han inculcado desde pequeños que sacrificarse y cronificar el sufrimiento por los demás es bueno, que eso nos hace mejores personas. Y ahí es donde muchos se quedan atrapados.
“Hay quienes convierten el dolor en sufrimiento”. En cambio. “Hay quienes lo convierten en una experiencia de aprendizaje que recibirá para vivir mejor”.
Anthony de Mello.
¿Por qué Dios permite el sufrimiento?
Casi me atrevo a asegurar que es una frase conocida por todos los seres humanos y Dios lo único que hace es generar abundancia, sostenernos y amarnos incondicionalmente sin ningún juicio. Dios solo se extiende en AMOR.
El libro de Un Curso de Milagros (UCDM), nos dice: tu sacrificio y tu sufrimiento se convertirá en el día de mañana, en tu amargo resentimiento.
Otra frase de Un Curso de Milagros (UCDM): Es imposible que a un hijo de Dios le ocurra algo que él no haya pedido previamente.
Algo que está claro, es que el dolor existe, en cambio, el sufrimiento solo es obra de tus pensamientos. Si sufres estás dormido/a porque el sufrimiento es un producto de tu sueño. Y es responsabilidad de cada uno de nosotros, no de Dios.
¿Cuántas veces alguien te ha dicho algo con una intención y tú has interpretado otra intención? No hace falta que busques muy lejos. Con tu pareja es suficiente.
¿Cuántas veces la pareja te ha dicho algo o le has dicho algo con una intención y ha reaccionado de una forma excesiva?
La propuesta de hoy en esencia es la siguiente: tomar conciencia que no puedes cambiar el acontecimiento externo, aunque sí puedes cambiar la experiencia interna desde otra percepción.
«BE WATER, MY FRIEND.»
— Bruce Lee.
Bruce Lee, utilizaba esta metáfora para expresar la importancia de ser flexible y adaptarse a cualquier circunstancia. En su explicación, decía que el agua se adapta a cualquier forma, ya sea una taza, una botella o un recipiente, y además puede fluir o golpear con fuerza.
La esencia de esta enseñanza es que, al igual que el agua, debemos aprender a ser flexibles, adaptándonos a los desafíos que encontramos en la vida.
Sacrificio y Manipulación.
Hemos visto anteriormente que la adicción al sufrimiento tiene varias caras: manipulación, sacrificio, victimismo, culpa, entre otras.
El sufrimiento siempre nos hace víctimas y, por lo tanto, la culpa siempre la tiene el otro. Y cuando hacemos esto es imposible cambiar. Porque se sustenta en un apego, en un apego de una cosa que pasa, y este apego ahora no está resultando lo que yo quisiera que fuera. Obviamente, para que yo caiga en esas creencias, tengo que creer en una fundamental, la creencia de la separación. O sea, que lo que me está pasando, yo no tengo nada que ver.
Manipulamos con el dolor, con el sufrimiento y el sacrificio, y sobre todo, en hacer sentir culpable a los demás. Porque si yo sufro y muestro mi sufrimiento frente a los ojos de los demás, los demás van a tener una consideración hacia mí y automáticamente van a decir: “Hay que ver lo que le ha hecho su marido o su mujer”. Y entonces, yo me anclo aquí y me quedo en: “Yo soy inocente, yo soy la víctima”.
Adicciones más habituales que esconde el sufrimiento.
| Si yo sufro o me sacrifico, consigo la atención de los demás. |
| Otra cara del sufrimiento, querer controlar a los demás. |
| Querer o procurar conseguir aquello que deseas. |
| Hacer sentir culpable a cualquiera que nos rodea. |
| Prohibir a los hijos aquello que no querías que hicieran. |
| Confundir que cuando me sacrifico y sufro, estoy amando. |
| Cuando mi rol es ser muy ayudador/a, me olvido de mí y me sacrifico. |
¿Te suena la frase?: “Después de todo lo que yo he hecho por ti, después de todo lo que yo me he sacrificado por ti, ¿así es como me lo pagas?”
También se usa el sufrimiento y el sacrificio como amenaza desde la indiferencia o desde el silencio.
Esta es una de las formas más sutiles de manipular con el sacrificio, proyectar culpa y dominar las voluntades de los demás. Nos convertimos en víctimas que buscan reconocimiento o atención a través del SUFRIMIENTO. Esto nos ata a una narrativa donde somos los buenos de la película, pero al mismo tiempo no tomamos el control de nuestra vida.
El sufrimiento es una adicción.
La adicción al sufrimiento es real, aunque opcional. Está alimentada por creencias que arrastramos desde siempre y que nos mantienen en la misma rueda. Estas creencias actúan como muros invisibles que nos impiden avanzar.
| Creencia limitante | Impacto en la Vida |
|---|---|
| El sufrimiento me hace más fuerte. | Te mantienes en situaciones dolorosas creyendo que es lo correcto. |
| Si me sacrifico, seré recompensado/a. | Confundes sacrificio con valor personal y perpetúas tu propio dolor, que ya lo has convertido en sacrificio. |
| Lo que me pasa es culpa de otros. | Mantienes la mentalidad de víctima y evitas tomar responsabilidad. |
¿Qué beneficios obtienes al seguir en el sufrimiento?
Aunque parezca extraño, muchas veces mantenemos patrones dolorosos porque obtenemos algo a cambio: ya sea atención, validación o simplemente la excusa perfecta para no movernos.
¿Por Qué Nos Quedamos Atrapados en el Sufrimiento?
La razón es simple: lo conocido, aunque duela, nos da seguridad. Prefieres aguantar la incomodidad antes que enfrentarte a lo desconocido. Además, tenemos creencias colectivas bien arraigadas que nos llevan a pensar que el sufrimiento es inevitable o incluso necesario.
| Ejemplos de Resistencia al Cambio: |
|---|
| Relaciones Tóxicas: «Si cambio, me quedo solo/a, y eso es peor.» |
| Trabajo Estresante: «Es horrible, pero al menos sé a qué me enfrento cada día.» |
| Hábitos Destructivos: «Cambiar requeriría mucho esfuerzo; mejor me quedo como estoy.» |
Transformar el sufrimiento en sabiduría para la Libertad Personal.
El sufrimiento es, en el fondo, una resistencia al cambio para fluir con la vida. Cambiar no es solo actuar diferente, es aprender a ver la vida desde otra perspectiva.
La clave está en soltar, no desde la resignación, sino desde la comprensión de que lo que vivimos tiene un propósito: ayudarnos a conocernos mejor.
El cambio real comienza cuando dejamos de buscar culpables fuera y empezamos a transformar nuestra percepción desde dentro. Para entender y aplicar esto, en este otro artículo sobre la resistencia al cambio tienes mucha información, un ejercicio práctico sobre la inversión de pensamiento y muchos ejemplos cotidianos, te invito a leerlo para que puedas vivir una vida plena y en paz.
Otra frase reflexiva de UCDM: Comprende que todo aquel que está involucrado en una situación está haciendo el papel que le corresponde, vamos a evitar todo juicio, toda condenación. Tú no sabes cuál es la experiencia que tiene que vivir cada alma.
El sufrimiento puede ser un maestro si sabemos escuchar su lección. Es hora de dejar de esperar y tomar acción.
Preguntas Frecuentes:
Si tienes más preguntas o deseas compartir tu experiencia, ¡déjanos un comentario abajo! Nos encantaría saber tu opinión.
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Especializada en la gestión del perdón, hago el árbol de tu vida con la Khabalah, Practitioner en PNL, y constelaciones con Playmobil. Estudiante y maestra de Un Curso de Milagros.