Qué es el Ego y las Relaciones Especiales Según UCDM.

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El Ego: Definición y Función.

El ego, según “Un Curso de Milagros”, es esa parte de nuestra mente que se identifica con el cuerpo y con la separación. Es el aspecto de nosotros mismos que vive en el miedo y la carencia, y que se aferra a la idea de individualidad y especialismo. El ego establece relaciones basadas en la comparación, el juicio y la necesidad de validación externa.

Características del Ego.

Separación: El ego se basa en la idea de que estamos separados de los demás y del amor universal.
Juicio: Constantemente juzga y compara, creando una falsa sensación de superioridad o inferioridad.
Miedo: Vive en el miedo, perpetuando la ilusión de carencia y competencia.

Relaciones Especiales: Naturaleza y Dinámica.

Las relaciones especiales de UCDM, son aquellas que el ego establece y valora debido a la percepción de que nos completan o nos aportan algo que creemos que nos falta. Pueden ser tanto positivas como negativas, pero siempre están basadas en juicios y comparaciones.

Niveles de Relaciones Especiales.

Las relaciones especiales se pueden clasificar en tres niveles principales, basados en el grado de vinculación y la función que desempeñan en nuestras vidas:

No existe un vínculo emocional significativo: Relaciones del Primer Nivel

  • Son interacciones que parecen superficiales o fortuitas, como encontrarse con un conocido en un ascensor “por casualidad” o tropezar con un desconocido “por despiste”.
  • Incluyen a personas que forman parte del entorno cotidiano, como el pescadero, vecinos, o compañeros de transporte público.
  • Cada encuentro no es por “casualidad”, es por causalidad y tiene el potencial de ofrecer una oportunidad de aprendizaje.

Existe un vínculo emocional de duración corta a media: Relaciones del Segundo Nivel.

  • Estas relaciones son más intensas y suelen involucrar periodos de enseñanza-aprendizaje considerables.
  • Los encuentros no son aleatorios y la relación puede terminarse o separarse por un tiempo.
  • Ejemplos incluyen conocidos, compañeros de trabajo, amigos temporales, jefes… y tampoco son “por casualidad”.

Relaciones caracterizadas por un vínculo emocional profundo y duradero: Relaciones del Tercer Nivel.

  • Estas conexiones son, generalmente, de por vida. Es profundamente emocional y puede ser una fuente significativa de especialismo.
  • Proporcionan oportunidades ilimitadas de aprendizaje y crecimiento personal.
  • Ejemplos de estas relaciones incluyen la familia cercana, como padres, hijos, parejas, y amigos de toda la vida.
Conclusión:

Buscamos en otros lo que consideramos que nos falta a nosotros. (Polaridad de escasez). Cada relación especial es una oportunidad para sanar nuestras percepciones y de corregir nuestros errores.

En cada tipo de relación debemos involucrarnos con el mismo compromiso, sin importar la conexión emocional existente. En las relaciones de primer nivel, donde no existe un vínculo emocional directo, es común pasar por alto estas interacciones, asumiendo que son normales y es lo que hay, centramos nuestra atención en prioridades más personales.

Esto nos hace perder oportunidades valiosas de salir de lo cotidiano. A menudo, nos enfocamos más en las relaciones de segundo y tercer nivel, aquellas que nos afectan más profundamente y moldean nuestra experiencia.

Sin embargo, ignorar las relaciones de primer nivel por falta de conexión emocional personal, por considerarlas habituales o poco importantes, perpetúa una realidad inalterada y nos impide despertar y evolucionar a través de ellas.

Impacto de las Relaciones Especiales (UCDM).

Emociones Negativas: Fatiga, molestia, ira, dependencia, pequeñez…
Emociones positivas: bienestar, idolatrar, alegría, envidia…
Ciclo de Juicio: Al etiquetar a otros, perpetuamos un ciclo de juicios que refuerza la separación y el especialismo.
Excesos de polaridad: Estas relaciones crean una dinámica de superioridad e inferioridad que alimenta el ego. Yo creo que “soy mejor que tú” o creo que “me falta algo que tú tienes”.

Cómo el Ego Manipula las Relaciones.

El ego utiliza las relaciones especiales para mantenernos atrapados en un ciclo de ilusión y separación. Al ver a los demás como diferentes o especiales, reforzamos la idea de que estamos incompletos y necesitamos algo externo para sentirnos plenos. Esto perpetúa una sensación de carencia y dependencia, alimentando las emociones negativas o positivas mencionadas.

Relaciones Especiales (UCDM) vs. Relaciones Santas (UCDM).

Una de las enseñanzas clave de “Un Curso de Milagros” es la transformación de las relaciones especiales en relaciones santas. Las relaciones especiales están marcadas por la dependencia, el juicio y la ilusión de separación. En contraste, las relaciones santas se basan en la verdadera igualdad y unidad entre las personas.

Las relaciones santas reconocen la esencia divina en cada ser humano, promoviendo el amor incondicional y el perdón. Este cambio de percepción permite que las relaciones se liberen de las ataduras del ego, convirtiéndose en fuentes de paz y crecimiento espiritual.

La Práctica del Perdón y la Entrega al Espíritu Santo (UCDM).

Practicando la expiación.

Reconocimiento del Especialismo: El primer paso es reconocer las dinámicas de especialismo en nuestras relaciones. Esto implica ser consciente de cuándo estamos buscando validación externa o comparándonos con los demás y comprender que estamos en el ego.

“Ya que tengo que vivir esta situación, aunque no me guste, decido vivirla desde el amor”.

— ➤ Después de conectar con el pensamiento y emoción egoicos, (impotencia, indiferencia, resignación, conformismo, injusticia, envidia, culpa, miedo…), localízalas en tu cuerpo y perdónate.
—➤ Me perdono porque me estoy haciendo daño a través de estas imágenes. Me perdono porque doy realidad a este sueño y no sé amarme a través de él. Te entrego a ti, Espíritu Santo, estas emociones y pensamientos de separación para que las expíes y se me muestre la percepción correcta. Decido que el amor me muestre quién soy en esta situación.
֎ Ejercicio del libro Decide de nuevo, de Marta Salvat.

Perdón y Expiación: El perdón, según “Un Curso de Milagros”, no se trata de perdonar las acciones de otros, sino de cambiar nuestra percepción sobre ellas. Perdonar es ver más allá de las ilusiones del ego y reconocer la verdad de la unidad y el amor. Al perdonar, nos liberamos a nosotros mismos como a los demás del ciclo de juicio y separación.

Santificación de la Relación: Entregar nuestras relaciones al Espíritu Santo es permitir que el amor real se exprese a través de ellas. Esta entrega transforma la relación, eliminando el miedo y la dependencia, y permitiendo que se base en el amor y la igualdad.

Ejercicios Prácticos para la Transformación.

Para facilitar este proceso, es útil realizar ejercicios de meditación y reflexión diaria. Esto puede incluir la práctica del perdón consciente, oraciones para pedir guía al Espíritu Santo y mantener un diario de autoobservación para identificar patrones de especialismo en nuestras relaciones.

Conclusión.

Comprender y transformar el ego y las relaciones especiales según “Un Curso de Milagros” es un proceso de introspección y perdón. Al hacerlo, podemos experimentar relaciones basadas en el amor verdadero y la igualdad, liberándonos del ciclo de juicio y separación del ego.

Si deseas profundizar en estos conceptos, te invito a ver los capítulos vídeo-libro completo: Decide de nuevo, de Marta Salvat en mi canal de YouTube, donde exploro más a fondo estas enseñanzas transformadoras.


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¡Hasta la próxima, corazón bello! 🤍


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